martes, 30 de marzo de 2010

Tiempo, la medicina del corazón

Ay, ay, y más ay. Y tuvo que pasar el tiempo para que ya esos potentes recuerdos se quedaran en los más lejanos olvidos. Mejor así. En realidad, mucho mejor así. Volver a vivir la vida como yo debí hacerlo desde un principio. Estoy herido, sí, pero el tiempo cura todo eso, aparte las cosas rutinarias ayudan en algo, creo...

En fin. Las cosas se dieron solas. Y aquí estoy. Seguiré viviendo mi vida tranquilo, sereno. Me dedicaré a lo que realmente importa: mis estudios (bastante ñoño el comentario xD), mis extrañas palabras, y mi música, fiel acompañante en momentos de angustia. Me levantaba el ánimo y me decía "vamos, la vida sigue. No te desanimes". La escuché, y vaya que me hizo bien. :)

La tierra se movió, muy fuerte, hace ya un tiempo. Vi mi vida pasar frente a mis ojos, pero gracias al todopoderoso, no pasó nada que deba lamentar.


La vida sonríe, hoy más que nunca :)

No hay comentarios: