miércoles, 31 de agosto de 2011

La nueva rutina

Recordar que no existe la necesidad de vivir, y adoptar un mecanismo, un algoritmo, que te mueva, durante la jornada, para sentirte satisfecho contigo mismo, sentirte útil, necesario, para alguien.
Adoptar rutina tras 3 meses de inactividad y de libre albedrío cuesta, más también si se trata de un ambiente laboral, ajeno, desconocido, pero llamativo. Me gusta lo que hago ahora, me gustaría poder tener mis equipos para poder avanzar en ese caso, y poder poner música en fiestas, bailes, eventos varios. Parte de mi ser que nunca desarrollé, y que hago ahora. Me gusta, pero no lo sé, hay muchos condicionantes...

Llevo dos días trabajando y ya quiero salir. No porque me desagrade el trabajo (me agrada, de hecho), sino que necesito la libertad, de poder salir a algún lado, poder tocar guitarra, hacer música, jugar, estudiar, etc. sin necesidad de respetar tiempos ni límites. Es esa libertad la que tanto extraño, pero que será mejor extrañarla más para así poder disfrutarla cuando la tenga de cerca nuevamente...

Bueno, mañana será otro día para dar el máximo esfuerzo porque todo salga bien...

(:

domingo, 28 de agosto de 2011

Las ondas

Y te has ido. Nuevamente te vi llorar, desconsolada, triste, apenada. La tortura de tu llanto es tan grande como la mía dejándote ir triste por ahí, dejando entrever lo cobarde que soy con lo perplejo que me dejas cuando siquiera pasas a mi lado, cuando me miras, cuando me ignoras...
Así como me prometí a mi mismo, decidí darle fin a este asunto de la mejor manera posible. No, a decir verdad no hay mejor manera, ni siquiera hay manera para poder olvidarme de ti. Es difícil, y te comprendo a veces, reprimir el sentimiento, las ganas, las desenfrenadas ganas de estar a tu lado, abrazarte y quizás besarte, si es que me lo permites. No, no será así, lo sé. Sé que te diré y que me dirás que no, porque todavía no puedes dar por terminada una etapa, porque todavía no puedes cerrar ese libro para empezar otro... porque todavía te gusta. Y lo entiendo, lo comprendo a la perfección. Aunque me gustaría no comprender ni entender ninguna situación, tengo que hacerlo así.
La resignación ha pasado miles de veces por mi casa. Me ha dicho "date por vencido", "ella nunca te querrá", "retírate y déjala...". Nunca la escuché, porque sabía que estaba dentro de mí esa convicción de quererte, de sentir que podía haber algo, pero eran ilusiones, espejismos. Nada más que eso.
Y empecé a tomar conciencia, y a decirme que esto no iba a funcionar. Hasta que te vi otra vez a su lado, y evidenciando mi desilusión, tomé la decisión y decidí que desde ese momento, no más. Por lo menos hasta que se te pase, hasta que se vaya el amor, el hechizo, la magia, el embrujo, el conjuro sincero que tan adorable es pero también tan doloroso cuando no corresponde. Eso también me ha sucedido.
Ya nada más. Me encantaría contradecirme a mí mismo, y demostrarme todo lo que ha sucedido fue una película mala, aburrida y dolorosa. ¿Tendré que esperar? No sé. Quizás sí. Ya fue suficiente.

Como las ondas que suben y bajan, como las olas en la playa, en un día de lluvia, así está mi corazón, que ahora tengo que calmar a la fuerza para que no inunde la razón. Es hora de (quizás) dejarte para siempre. De (quizás) darme por vencido y decir: "No, no es ella". Pero sé que la esperanza es lo último que se agota... bueno, me quedan las reservas.


martes, 23 de agosto de 2011

Nada es imposible

Hora de decir
que aunque duela en un inicio,
calma después.

Levanto mis manos,
las llevo a mi rostro
y digo sincero:
"esto no va a suceder"

Pero me levanto,
me pongo de pie
y digo, fuerte:
"No me rendiré"


(:

miércoles, 10 de agosto de 2011

Lost



Lee esta entrada con esta canción de fondo, aunque no entienda nada de su contenido...

Cómo quisiera yo encontrarme, viendo tus ojos que quieren decir algo. Exijo saber dónde estoy porque no lo sé. Me llevaron a otro lugar, otro extraño lugar. Nunca pensé estar en esta situación tan incómoda pero confortable a pesar de todo. Créeme que no quisiera nunca encontrarme si así puedo estar cerca tuyo. Lamentablemente estoy tan cerca y tan lejos para lograrlo... bueno, no siempre se puede tener lo que uno quiere.

Eso es lo que escuché, pero también escuche que "querer es poder". Y con esa frase mejor me quedo. ¿El motivo? Ni yo lo sé. Es una sensación extraña y peculiar, siento como si fuera a explotar pero no exploto, como si fuera a estallar de felicidad. Es extraño, nunca lo sentí.

Te me acabas de aparecer otra vez. Perplejo quedé al verte otra vez ahí donde no estás, donde mi mente me hace ver los espejismos de tu rostro, de ti. Tan peculiar es este desierto que no lo siento seco, ni caluroso. O tal vez sí. De hecho así es, no me percaté. Perdón

Efectivamente así es: es seco, no me deja nada que beber ni comer. Es como ansiar un beso tuyo, es como efectivamente ansiar un beso tuyo, este desierto. La arena me hace llorar como un abatido, el viento seco y cálido me da más y más sed de ti, y la arena infinita de las dunas absorbe mis últimos esfuerzos, mi sudor, por aferrarme a eso que veo, ese espejismo... esa ilusión tan bella, pero que es solamente eso. Una ilusión, solamente una ilusión.

Creo que no me siento tan perdido después de todo. Ya sé dónde estoy, pero solo falta encontrar la salida. Un oasis, una ciudad, o encontrarte a ti.

(:

martes, 9 de agosto de 2011

Detrás del umbral

Estás ahí, parada frente a mis ojos, llorando. Angustia refleja tu rostro una y otra vez, pena y unas ganas tremendas de darte un abrazo, de darte un consejo y de acariciar tu cabeza, otra vez. Abrazarte tan fuertemente y ahogar el llanto, la angustia y el dolor que tanto tienes. Creo que sé por quién sufres, pero también creo que no es el único factor de tu tortura.

Detuve mis impulsos cuando te vi llorar. Sentía que debía correr, tomarte de la mano y aferrarte a mi, para que todo lo que te agobia se vaya, aunque sea por el momento; lamentablemente no pude hacerlo. Soy un imbécil que se muere de timidez al verte, y más todavía al tenerte cerca... me sentí mal en ese momento, debí estar cuidándote y no abandonándote. Lo siento...

:/

Y soñar...

Ya que no puedo decirte las cosas en la realidad, te las diré allá. Donde la vida se dobla en 8 y los árboles crecen hacia abajo. Donde te caes de edificios sin razón. Me gustaría quedarme ahí contigo para siempre... ahora si fuese real, no tendría necesidad de soñar...


(Piensa)Paso el tiempo pensando en ti (en mi)
paso el día amándote...(Piensa)
poco a poco me pierdo en ti...
(no te das cuenta de mi) no te das cuenta de mi...

lunes, 8 de agosto de 2011

Para la próxima vez

dime de qué hablarte. O quizás no deba decir nada, quedarme en silencio e irme lejos.

Pero dímelo...

No. Sabes? Mejor no me digas. Es esa ignorancia lo que lo hace divertido... déjame ser dichosamente ignorante con esto. Y déjame buscarte y encontrarte, equivocarme quizás, pero acertar cuando sea debido. Y así conocerte más y mejor. Que de eso se trata todo este juego...


sábado, 6 de agosto de 2011

Sentimiento: Caminando por las calles del delirio

…Y así me encontraba, alucinando tu rostro en cualquier parte. Pensé en acabar con la historia… no pude. Cerré los ojos, ni eso… ni nada. Sentí muchos escalofríos, sentía que almas recorrían mi fría y helada espalda. Yo, muerto de frío y calor a la vez, volví a ver tu rostro. Volví a cerrar los ojos… no pude, te seguía viendo… estabas en mis pensamientos… como si quisieras dominarme…

Lo subjetivo me absorbió, lo inconmensurable y lo extraño se mezclaban para formar una extraña gelatina de pensamientos erróneos en mi aturdida mente, que no daba más guerra. Sentía como las almas recorrían mi cuerpo. Y lo surrealista, lo inverso, lo peculiar… visitó mi mente.

Tenía mis manos heladas, mi cuerpo estaba ardiendo, mis ojos se salían de su órbita. Pero tú, no te apartabas. Te reías, escuchaba como te burlabas de mi sufrimiento… de mi castigo… te reías… y lo hacías todo más difícil. Mucho más difícil…

En la oscuridad, te veía. Tu cara, se deformaba. Algo tenebroso, algo escalofriante, algo espeluznante… eras tú… ¡sí!

Demonios azules pasaban a mi lado, y asustado empecé a correr… pero no podía, estaba amarrado a una especie de cámara de experimentos, y sentí que me partían por la mitad… me sentí observado, por muchos ojos llenos de curiosidad… pero de un momento a otro me veo envuelto en una caída… caída que no tiene final.

Veo como esa horrenda habitación se desvanece en el cielo. Caigo y pierdo altura cada vez más, pero al llegar al suelo… paso de largo... paso un lugar… tenebroso e inhóspito por sí solo… sigo bajando… veo otra dimensión, y me detengo ahí. Era como viajar al futuro… y conocer otro estilo de vida.

Me caigo a un pozo, pero en vez de bajar… ahora subo… de manera muy extraña. Por un momento sentí que estaba delirando y que iba a morir. Y lo ratifiqué cuando intenté despertar y no pude… pensé que era una mala, una muy mala pesadilla…

Dormido, comienzo a sentir caricias… siento cosquillas… pero después siento algo frío, algo hiriente… sentí mis manos como hielo… tan congeladas… y mi cara… ardiente. Estaba algo rendido… y no quería saber nada más sobre cosas extrañas… con esto quizás amanezca en otro lugar, en otro tiempo… en otro espacio…

Tiritando… siento como los grados bajan en mi cuerpo, y como en mi cerebro aumentan… pensé que tenía gripe y que estaba delirando, mas todos los “sueños” que tuve… fueron una simple pesadilla causada por un resfriado mal cuidado… pero había algo que los hacía sentir reales… realmente reales…

Quería levantarme, lo hice… mis piernas aguantaban lo suficiente como para poder estar de pie… pero… de pronto… empecé a correr… sin destino… buscando la salida. Como un animal enjaulado, me sentía, atrapado y confiscado en el delirio… en los momentos abstractos. Quizás, eran mis últimos momentos con conciencia que tenía… quizás no. Talvez era ese lugar intermedio después de la muerte, al que se le hace llamar purgatorio… talvez no. Tal vez era el infierno… tal vez no. Quizás fuese el cielo… quizás creeré que estoy loco y me suicidaré… quizás espero a las almas que me recojan y me lleven al descanso… tal vez no…



Recuperado de uno de mis tantos respaldos de hace mucho tiempo (:

miércoles, 3 de agosto de 2011

Esos recuerdos~

Oh. Hoy conversé mucho acerca del pasado, más de lo que había pensado alguna vez: Recordé cuando era un pequeño inocente que jugaba en aquel PC que se caía a pedazos, con unos juegos tan realistas que pensaba que entraba en una dimensión distinta. Real, pero diferente a donde estaba en realidad; era tan cómodo no tener obligaciones y casi no tener responsabilidades (salvo ir a estudiar). No preocuparse ni de penas de amor, ni de asignaturas que pasar. Solamente el vivir y disfrutar, en un parque, en la casa, tomando té, disfrutando de algún programa bueno en la televisión. Esa televisión que hoy ya no existe, que se perdió, que quedó en el inconsciente colectivo de toda nuestra generación. Esas series que nos teletransportaban a mundos irreales, fantásticos, quizás excéntricos, pero al fin y al cabo eran oníricos para nosotros, y sería una completa maravilla compartir con quienes más admiras en las aventuras y las desventuras de la animación.

Hoy recordé, no como otras veces. La nostalgia se apoderó de mi persona, no podía detenerme. Era maravilloso y lamentable ver cómo todo ello se perdió. Si pudiesen dar esos programas otra vez, le daría un poco más de esa irrealidad fantástica que nos hace soñar a una vida llena de responsabilidades y obligaciones que tomar y cumplir, respectivamente. Quizás debamos hacernos más niños y menos adultos para nuestras cosas: Quizás para conservar la juventud, esa que no se nota en el cuerpo, sino en cómo vives tu vida; quizás para tener un buen pasar por la vida, sin amargarnos demasiado. Vivir como niños, trabajar como adultos. Disfrutar lo vivido, aprender de todo. Aprehender el mundo. Como los niños...

Aprehender el mundo: ahí está el dilema. Ya estamos grandes, no tenemos más que aprehender. No es así, estamos rotundamente equivocados. Nos queda mucho, muchísimo por aprender. Nuestro orgullo nos hace cegar la mente de niño que tenemos dentro; nuestras obligaciones obnubilan las ganas de poder hacernos un poco mejores al valorar el aprehender, y lo despreciamos. No entiendo realmente qué fue lo que nos pasó, pero ello que debió seguir ahí, ahora no está. Nos sentimos acongojados por ello, pero hay que cambiar... en parte.

El pasado siempre estará para nosotros. Es nuestro deber cuidarlo, ser cariñoso con él, y hacerlo perdurar lo más posible. Nuestro pasado ahora no está con nosotros, pero siempre permanecerá en nuestros corazones, atesorando cada momento, y en nuestras mentes, en lo que conocemos por "memoria".

Pero hay cosas que, una vez que vuelves a ver, te hacen desear que lo que fue, sea. Así me pasó anoche. Volver a ser ese niño que estaba más pendiente de completar su álbum de láminas, de esperar ansioso el "tazo" de las papas fritas, de ganar cartones de su serie favorita, o de esperarla en la televisión a la misma hora de todos los días hábiles. De jugar con la vida, con lo que te da y lo que te quita. Con lo que tienes en el momento, disfrutarlo, para siempre y sin límite de tiempo.

Eso fue lo que pasó hoy. Recordé. No es pecado, es gratis (todavía), e hizo latir mi corazón más de una vez por algo quizás irrelevante a estas alturas, pero atesorado por el niño que llevo dentro de mi. Ese niño que no se cansa de jugar a ser grande, y de vivir disfrutando, pero sobre todo, aprehendiendo.


:)

Disculpa

Discúlpame por recordarte tanto; por imaginar tu presencia a mi lado; por encontrarme vacío necesitando tu compañía.

Disculpa por obsesionarme; por decirte lo que siento aunque no lo leas, ni te interese; por pensar que bailo contigo en medio de un mar de difusas figuras, que deberían ser personas, pero que tu mirada hace que sean extrañas figuras desenfocadas.

Y sólo enfocarme en ti, y en decirte tantas cosas a la vez que termino por contaminar el diálogo con mis nervios; pides calma, atención y sosiego, pero no puedo dártelo. Todo se hace al revés, a la inversa. Sentido distinto...

Ahora ya sé (en parte) lo que tengo que hacer...

Me iré a dormir. Te veo en mis sueños


(:


lunes, 1 de agosto de 2011

Mirar al Oriente

Estoy donde siempre estuve, y donde nunca dejé de estar. La dimensión de mi pasado me recuerda los cómodos tiempos donde nadie se preocupaba por nada: ni por amoríos, ni por obligaciones. Sólo estaba el hacer amistades y pasarla bien.

Hoy quise volver atrás, y verme tan cambiado que llega a impresionar. No quiero ser arrogante con mis cambios ni nada por el estilo, disculpa si te sentiste ofendido.

Hay cosas que no van a cambiar, no creo que cambien: una de ellas es ésta. Mirar hacia el oriente, donde está mi pasado, mi presente y mi futuro quizás.

Oriente, que llevas los sonidos de la nostalgia, y me hace recordar miles de millones de cosas; que haces de cada momento algo especial; que demuestras que no importan las barreras culturales, geográficas o lingüísticas para intentar transmitir una emoción, una sensación distinta, con una frecuencia distinta a la habitual en estos lados del mundo; que cada día te siento más cerca, aunque el fanatismo se haya ido y no me quede dormido escuchándote; y que en cada momento puedo volver a escucharte mientras al mismo tiempo recuerdo los colores de la época de las chapas, los llaveros, los guantes, los eventos y las palabras, incomprensibles para la mayoría.

Puedo acudir a ti, hermoso pasado, para que me cobijes ahora que estoy en un presente lleno de incertidumbres, y puedas darme esa tranquilidad necesaria para reflexionar.

Espero algún día poder conocerte en vivo, y no en fotos ni en vídeos.

:D